26.3.10

Guía práctica de conocimientos inútiles: el mundo de la moda.

"Buenas noches, damas, caballeros... y esqueletos vivientes".

Desconozco si usted, avezado lector, está enterado de los ires y venires del "mundo de la moda", y por lo mismo, ignoro si se sentirá profundamente ofendido si le digo que ese es uno de los muchos temas que me importan algo así como ocho kilos de verga en rebanadas. Pero dado que somos objeto constante de bombardeos publicitarios donde nos dicen que si las mujeres entran en ropas diseñadas para el cuerpo de pubertas esqueléticas y los hombres nos vemos como Cristiano Ronaldo pero en joto mientras nos ponemos sombreros de plumas seremos mucho más felices y dignos de ganarnos el reino de los cielos, donde está papi Maciel que diosito que no lo ve todo porque no existe lo tenga en su santa gloria... ajem, me desvié. Decía entonces que, dadas esas circunstancias, yo, preocupado por la salud mental de ustedes (la mía no, no lloren por mí, yo ya estoy muerto), he decidido hacer una práctica guía para comprender mejor lo que está "fashion", lo que es "in".

La historia de la moda agarra y empieza el día en que a un buen pitecantropo... bueno, más posiblemente a un homo erectus, se le ocurrió cubrir su ídem con las pieles de los animales que cazaba. La invención de la ropa fue, pues, por necesidad; ya sea que necesitaran proteger sus partes "pudendas" o para protegerse del frío del invierno, que era culerísimo. Muchos años después, se comenzó a utilizar la ropa con necesidades "específicas", sobre todo para distinguir al gobernante o al sacerdote (que en muchas ocasiones era el mismo). Se inventó la ropa ceremonial, y luego, a través de la historia, se le agregó color, se inventaron nuevas telas y procesos de fabricación de la misma. Después, llegamos a las cortes europeas del renacimiento, donde ya existía un sistema muy complejo de distinción entre las personas que tenían poder, las personas que tenían lana (literalmente) y las que no tenían ni madres. Para distinguir a los más poderosos se inventaron una serie de adornos ridículos, como objetos brillantes combinados con telas caras y difíciles de conseguir, hasta que a principios de la ilustración se contemplaban cosas como ésta:

La señora con puchero de aquí arriba es Luis XIV

De hecho, y regresando un poco a la época del renacimiento, recuerdo un texto de un artículo sobre moda de un folletín, que decía algo mas o menos algo como esto: "Oh, ¡Pero que gran desvergüenza! Los hombres de hoy usan unas faldas tan cortas, que no les cubren ya ni las partes pudendas ni el trasero". Así, señores y engendros que me leen, surgió... el uso del pantalón con camisa larga.

Conforme pasamos de la Edad Media al Renacimiento, a la Ilustración, a la Revolución Industrial y finalmente a la Edad Estúpida, el diseño de ropa se fue volviendo una profesión cada vez más importante. Pero a partir de la mitad de la Edad Estúpida (principios de los 1960's) la profesión de diseñador de ropa se transformó poco a poco en "diseñador de modas"; es decir, en el "creador" de una serie de "tendencias" repetitivas, alguien que es conocido por sus diseños, que son adoptados por una serie de changos bolonios a los que les gusta imitar todo lo que ven. Para eso, también requirió de "modelos", es decir, mujeres (y en ocasiones hombres) esculturales en las que su ropa se viera mejor al momento de presentarla. Y supongo que, por esa misma razón, incluyeron sus raras filias sexuales en el diseño de la ropa que hacían y cambiaron el modo en el que la hacían, caso de algún diseñador británico al que se le ocurrió la brillante idea de presentar a Twiggy, que fue el principio del fin para los que nos gustan los modelitos rollizos como Marilyn Monroe o Brigitte Bardot, snif.

¿Creen que la delgadez extrema "es lo de hoy" chicas? Noticias: esta foto es de los 60's. ¡Vamos, a vomitar más rápido!

Los simpáticos diseñadores pensaron que era entonces una buena idea ahorrar tela y comenzar a crear ropa para chicas que pesaran máximo 38 kilos; y desde entonces vemos esa simpática competencia entre modelos por ver cuál de ellas ingiere menos agua diario y puede aguantar dos días comiendo un grano de uva.

Desde entonces las adolescentes, entes volubles y depresivos, se pusieron a llorar al ver el "ideal de belleza" que les presentaban, así que decidieron picarse con el dedo (en la boca, cerdos) para vomitar el exceso de comida que las hacía ver "gordas." La frase favorita de muchas mujeres actualmente es "estoy gorda", aunque también incluyen en el repertorio "me veo gorda", "¿me veo gorda?", "¡estoy gordísima!" y "creo que engordé". También es ampliamente conocida su afición por las dietas idiotas, que pueden incluir cosas como "ingiere cinco licuados de plátano y una tortilla de huevo con mermelada por la mañana y no comas nada el resto del día; durante la noche, bebe tu orina"; bautizándolas con nombres que sólo se le podrían haber ocurrido a un escarabajo en celo con retraso mental, como "dieta del astronauta", "dieta de la alcachofa" o "dieta del perro con buen humor". Juro por Jiová que estos nombres no los inventé yo, sino que los he escuchado en conversaciones con conocedoras de tan interesantes temas.

Arriba: Esquema de dieta clásico. A la izquierda, retrete; a la derecha, modelo. Encuentre las diferencias.

Seguramente habrán escuchado términos incomprensibles para una persona con un IQ mayor de 65, así que, en mis amplios esfuerzos por comprender el funcionamiento semineuronal de modelos y diseñadores, presento este práctico glosario para usted, persona no familiarizada con ideas tan importantes en nuestro "mundo moderno":

Fashion: Término que se refiere a las "últimas tendencias". Lo fashion es lo que está "in", todo aquello que tiene una vigencia de 6 meses, cuando mucho. Lo lamento profundamente por su capital, pero si quiere estar "fashion", prepárese para cambiar su ropa en el lapso anteriormente mencionado, a riesgo de verse fuera del agradable ambiente de la moda.


Trendy: Se refiere a toda persona que sabe vestirse "con gusto y clase". A la persona "trendy" no le interesan nimiedades como condiciones climáticas o estética. Siempre sabe conservar la elegancia, y sobre todo, su capacidad de adaptación a lo nuevo. Ahora que está de moda ser "ecológico", las personas trendy colaboran con atuendos verdes, que reflejan su preocupación por el ambiente, por tan sólo mencionar un ejemplo.


In: Todo aquello que "se lleva hoy", que es "lo de hoy", y que te permite estar fashion.


Out: Todo aquello que ya pasó de moda, es out. Por ejemplo, verte como punk zarrapastroso o hippie zarrapastroso está out. Lo de hoy es verse como hipster zarrapastroso neo punk hippie.


Chic: Se refiere a las personas que no le gusta verse desaliñadas, aunque si la moda lo exige, se verán cuidadosamente desaliñadas.



Man Fashion: Apasionante tema que no habíamos cubierto. La moda para hombres suele ser todo un ejemplo de buen gusto. A veces, las tendencias para hombres suelen ser trendy-fashion-inoutchic, por lo que abarcan todo el campo de la moda al mismo tiempo. Y tenemos algunos magníficos ejemplos.



En fin, el mundo de la moda es tan apasionante y tan interesante, que no comprendo como han podido estar alejados de él por tan largo tiempo. Espero que esta pequeña guía les muestre un poco de lo mucho que hay detrás de la mente de los grandes diseñadores y de las modelos. Sigan por su camino del arcoiris.



For the lulz: frases de modelos. Vuelvo a jurarles que ninguna la inventé yo:

"No he cometido ningún delito. Lo que hice fue no cumplir con la ley." Jennifer López.

"Siempre que veo la tele y veo esos pobres niños hambrientos en todo el mundo, no puedo evitar llorar. Quiero decir, me encantaría ser así de flaquita, pero no con todas esas moscas, muerte y esas cosas." Mariah Carey.

"El fumar mata y si te mueres has perdido una parte muy importante de tu vida." Brooke Shields.

"No es la contaminación lo que está dañando el ambiente. Son las impurezas en nuestro aire y en nuestra agua las que lo están haciendo." Pamela Anderson.

"Confucio fue uno de los famosos chinos japoneses que inventó la confusión." Giouse Cozzarelli.

"Yo no como de eso". Paris Hilton y su sesuda opinión sobre la gripa AH1N1.

"Esa perra sinvergüenza merece ser matada a patadas por un asno... ¡y soy soy justo la indicada para hacerlo!" Claudia Schiffer hablando de Naomi Campbell.



Ah, sí: 789848595975 kudos, internets y puntos de respeto al que me diga quién dijo la frase del inicio y en dónde lo hizo.




P.D. Si, volví. Ustedes disculparán las largas ausencias y no haber contestado comentarios de ninguna clase. Trabajo, le dicen. Snif.

Adéndum: Publiqué sobre política y economía como invitado en Desiderátum, el blog del buen Jordy. Así es que sin, más preámbulos, no sean flojos y éntrenle a un post más seriesón haciendo click justo aquí.

3.3.10

"Reflexiones" de un viejo dinosaurio sobre los libros y la escritura


¿Que representa para ustedes un libro?

No me vengan con apantallamientos pseudo intelectuales: "o sea goei, yo crecí a la sombra de los libros, mis primeros maestros fueron Sartre y Kant". "Mi librero era como un árbol de ricos frutos, eso constituye la sabiduría y no otra cosa". Mamadas.

Un libro, finalmente, es un modo de acceso a un conocimiento. Cuando nos hablan de "un libro", la primera imagen mental que se genera es la de ese objeto encuadernado, con tapas de cartón blando o duro, y delgadas láminas de celulosa sobre las que se imprimen caracteres más o menos incomprensibles de acuerdo al grado de idiotez del posible lector. Muchos beneficios se le atribuyen al libro; el principal, para mí, es que sirve para almacenar de un modo más o menos confiable los conocimientos de la humanidad. Una gran memoria colectiva (lo cual es también un arma de doble filo, pero eso es otro asunto).

Por otra parte, en la actualidad tenemos los internetz. Fuente de amplísima sabiduría, conocimiento, lulz, idioteces y porno (no necesariamente en ese orden). Es un medio eminentemente visual, como la televisión, pero a diferencia de ésta, aquí puedes buscar lo que se te antoje, mientras tengas una velocidad de conexión medianamente buena y un módem aceptable (si, ya sé que eso en este país es un mito). Y entre otras cosas, encuentras libros.

Uno de mis autores predilectos de toda la vida (lo comencé a leer hace más de 10 años y se volvió un favorito en automático) es Isaac Asimov (si no conocen a Asimov, tírense a un pozo, pelagatos ignorantes). Mi interés por todo lo que tuviera que ver con ciencia ficción escrita (algo que propició el cine, en primer lugar) me llevó a conocer la que ha sido galardonada con el premio Hugo como "la mejor saga de ciencia ficción de todos los tiempos." Estoy hablando, obviamente, de Fundación.

En el libro intitulado "Preludio a la Fundación", donde se narran las aventuras de un joven Hari Seldon en Trantor, capital del imperio galáctico, ocurre la siguiente escena:

—¡El Libro! Cierto, hay un libro. Veámoslo.
Seldon se lo pasó y Dors lo miró pensativa.

—Puede que no nos sirva, Hari. No parece que vaya a encajar en ningún proyector conocido. O sea, que no tendrás más remedio que pedir un proyector mycogenio y querrán saber para qué lo quieres. Entonces, descubrirán que tienes el Libro y te lo quitarán.
—Si tus suposiciones fueran correctas —sonrió Seldon—, tu conclusión sería irrebatible, pero resulta que éste no es el tipo de libro que piensas. No es para ser proyectado. Está impreso en sus páginas, y las mismas se van volviendo. Gota de Lluvia Cuarenta y Tres me lo fue explicando.
—¡Un libro impreso! —Era difícil decir si Dors estaba impresionada o divertida—. ¡Pero si esto es de la Edad de la Piedra!
—Pre-imperial, aunque no del todo. ¿Has visto alguna vez un libro impreso?
—¿Considerando que soy una historiadora? Pues claro, Hari.

—Ya. ¿Pero como éste?

Entregó el libro a Dors y ésta, sonriendo, lo abrió; luego, volvió la página, después, pasó otras.

—¡Si está en blanco! —exclamó.

Parece estarlo. Los mycogenios son obcecadamente primitivistas, aunque no en todo. No ponen objeciones a servirse de la tecnología moderna para modificar lo que les convenga. ¿Quién sabe?

—Puede que sí, Hari, pero no comprendo lo que me estás diciendo.

—Las páginas no están en blanco, sino cubiertas de microimpresión. Ven, dámelo. Si aprieto esta plaquita que hay en el borde interior de la cubierta... ¡observa!

Al instante, la página por donde el libro estaba abierto se llenó de líneas impresas que se movían hacia arriba con lentitud.

—Puedes ajustar la velocidad del movimiento ascendente para que se adapte a tu ritmo de lectura torciendo ligeramente la plaquita a un lado o al otro —explicó Seldon—. Cuando las líneas llegan al borde superior, es decir, cuando tú llegues a tu última línea, vuelven a bajar y se detienen. Entonces, pasas a la página siguiente y continúas.

—¿De dónde sale la energía que hace todo esto?

—Lleva incluida una batería de microfusión que dura el tiempo que el libro dure.

—Entonces, cuando se acaba...

—Te deshaces del libro, que a lo mejor te reclaman antes de que se agote, por lo mucho que se utiliza, y te dan otro ejemplar. Nunca se cambia la batería.

Dors cogió el libro por segunda vez y lo miró por todos lados.

—Debo confesar que nunca había oído hablar de un libro como éste —dijo ella.

—Ni yo. En general, la Galaxia ha avanzado tanto en tecnología visual, que olvidó esa posibilidad.

—Esto es visual.

—Sí, pero no con efectos ortodoxos. Este tipo de libro tiene sus ventajas. Encierra mucho más de lo que suele contener un libro visual corriente.

¿Les suena familiar? Si no les suena, debería:


¿Cuánto tiempo creen que les quede de vida a los libros impresos?

Vamos a hacer un poco de historia.

Sumeria, 3300 A.C.
-¡No mames, grandísimo cabrón, otra vez se te olvidó llevar las cuentas de las vacas! ¡Cuando el jefe se entere, te va a meter un palo por el ano (literalmente)!
-No seas pendejo; mira, acabo de inventar un sistema para llevar la cuenta perfectamente: en este pedazo de barro húmedo (sin albur, puerco) voy marcando cuántas vacas quedan. Así sabremos si nos robaron o no. Cuando el barro se seque, tendré el registro completo.
-Ah, chingá; ¿y a poco le entiendes a ese pinche desmadre?
-Claro que le entiendo, wey; y que Ishtar, la que está bien buenota, me ampare desde su trono celestial si logro mi idea: hacer un sistema completo que represente nuestras voces.
-Huevos, puto; no le veo futuro a tus ideas...

Egipto, 2600 A.C.
-No seas cabrón, aquí no hay modo de llevar registros. Nomás hay pura pinche arena. Y el lodo ese junto al río no sirve para hacer tablillas.
-Pues estoy desarrollando un nuevo método para tener donde escribir: mira, esto lo obtengo de la planta esa del papiro. Cuando se seca puedes escribir sobre esta fibra con estos fluidos de color negro.
-¿Estás idiota? Ve tu chingadera: delgada, frágil, con cualquier madre se quema y se ve que te tardas un chingo en dejar el papiro de ese modo... no, no mames, eso no va a aguantar. Mejor mando gente a buscar arcilla.

Pérgamo, 500 A.C.
-Estos pinches culeros de Alejandría ya no nos quieren mandar papiro. Quesque somos su "competencia intelectual" y nos van a dejar echos mierda. Mamadas.
-Tranquilo... mira, con esto les vamos a partir la madre: esto es piel de animal desecada, es más resistente que el papiro y absorbe igual de bien la tinta... tinta creada para eso, claro.
-¿Y vamos a escribir en pieles de animales? Que pinche asco, la verdad. No, mejor voy a ver si puedo conseguir papiro por otro lado.

Alemania, 1450
-Ya me cansé de repetir y copiar este cochino texto 1000 8000 veces. Se lo dejaría a mis pinches criados si no fueran tan ignorantes.
-Ya no va a haber necesidad de eso. Mira ésto: es un plancha en la que se pone el texto, le embarras tinta encima y la comprimes contra esta lámina que, por cierto, se le llama papel. Llevan siglos haciéndolo en China y es menos pesado que el pergamino.
-Uta, que hueva. Mejor lo sigo haciendo a mano, en lugar de estar tallando la pinche plaquita esa en madera...
-Pero se está perfeccionando. ¿Te acuerdas de Johannes, el borrachote hijo de Friele? Bueno, se compró una prensa de vino y le puso letras móviles fundidas... el texto se podrá cambiar las veces que quieras. Será rapidísimo hacer copias de libros. La tecnología avanza a pasos agigantados, muchacho.
-Meh, yo creo que Johannes nomás te hizo pendejo y se compró la prensa para poder emborracharse a gusto.

Aztlanland, 2010
-Wey, no digas pendejadas, los libros, nunca, nunca van a desaparecer... mira, no hay un mejor soporte, lo digital es demasiado volátil, eso del internet no va a pegar...

Si, es cierto: los libros, como nos dan esa ilusión seguridad que sólo la "materialidad" proporciona, nunca serán sustituidos. Ahí está el ejemplo de la biblioteca de Alejandría, joya del saber antiguo que se conserva hasta nuestros... wait.

LOL A DUDE ON FIRE. Por cierto, esto también les sucede a los libros, ¿eh?

Ya sé, los libros huelen bonito, tienen mil usos distintos (pisapapeles, calzas, tabiques, etc), comprarlos da emoción y muchas cosas más. Pero se olvidan de un hecho fundamental: son importantes PARA NOSOTROS. Para nuestros nietos ya no lo serán tanto (bueno, mis nietos en todo caso, ya que son gente horrible y dudo que alguien se anime a procrear con ustedes). Comparen el número de horas que pasan frente al XBox y la computadora con la cantidad de horas que pasaban ustedes frente a dichos aparatos. De hecho, para ustedes no existían; quizá por eso son treintones con vidas bolonias y ñoñas o ventieañeros con cerebro de ectoplasma. El niño promedio es Timmy Turner:


O sea, un niño hiperactivo, medio idiota, que dedica 5687 horas de 24 diarias a jugar videojuegos y estar frente a la computadora. ¿Realmente creen que pueda sentarse tranquilamente a leer un libro? Un libro de los viejitos, de papel, algo que no tenga pantalla...

Eso sin mencionar otra de las grandes ventajas del libro electrónico: el ahorro de espacio. Somos 6700 millones. Las viviendas mínimas tienen entre 30 y 40 m2 de superficie, y eso de este lado del mundo. En Japón son aún más pequeñas. ¿Dónde hay espacio para almacenar libros? En el soporte electrónico, por supuesto. Entre otras muchas ventajas logísticas que no pienso enumerarlas, ya que retener su atención por más de 5 minutos sin insultarlos es casi imposible.

Ya sé, me estaré ganando el desprecio infinito de los defensores de los libros impresos al decir esto. No me importa, ya veremos que pasa en unas dos o tres generaciones (si ustedes están vivos para entonces, yo si pienso estarlo porque viviré mínimo 200 años). Y ojo, no estoy diciendo que los libros desaparecerán, solamente su formato impreso actual.

No sé ustedes, pero yo si estoy emocionado por ser testigo de una revolución cultural de este tamaño. Claro, es posible que esté equivocado, pero también es posible que no lo esté. Además, observen en la breve y seriesísima reseña histórica que hice arriba, que cada vez que hubo un cambio de soporte para los libros se multiplicó exponencialmente la cantidad de los mismos que era accesible a la gente. Pienso estar pendiente a ver que sucede.

Por el momento, espero los alegatos a favor del libro impreso. Será divertido leerlos... desde un soporte digital.

P.D. Para los dos lectores a los que les importa: mi ausencia no se debió a otra cosa mas que exceso de trabajo. Pronto andaré por sus rumbos leyendo y comentando y así. Ah, y ahora contesté comentarios a tiempo: grasias a la birgensita okurrio el milagro. Yeah.

Actualización a la hora: Olvidé mencionar algo fundamental, y me doy cuenta con los comentarios que están llegando. Los soportes digitales actuales no van a quedarse así. Se perfeccionarán, y mucho; el kindle ya es un ejemplo de libro electrónico que no cansa tanto la vista como una pantallita normal. Y sí, yo también soy fanático de los libros impresos y como han mencionado, estoy dispuesto a morir solo, viejo y abandonado en mi biblioteca. O vender alguno de vez en cuando y ser inmensamente millonario como coleccionista de antigüedades... a los 90 años. La vida es injusta, snif.