3.8.12

The Dark Knight: una trilogía vista con ojos de historieta.


Hace un par de meses hice esta reseña. Desde entonces había permanecido en estado casi catatónico por la ansiosa espera de la llegada de Batman. Por fin se cerraba una trilogía de mi superhéroe favorito; una trilogía bastante decente, quizá la mejor que podría pedir. Algo que Tim Burton dejó inconcluso y (por fortuna) Joel Schumacher también.

Christopher Nolan, el nuevo mago de los efectos especiales y los blockbusters psicológicos, fue el encargado de llevar de nuevo al cine la saga del hombre murciélago. DC Comics apostó una vez más por Batman, su mejor personaje, años después de la cancelación de "Batman Triumphant" y los horrendísimos resultados de Schumacher con "Batman & Robin" y su BATMAN CON PEZONES EN LA ARMADURA.

Y logró retomar la dignidad de Batman. Vaya que lo logró.

"Batman Begins" (2005) fue la primera película que exploró detalladamente un origen para el caballero oscuro. Mostró un Bruce Wayne con profundas secuelas psicológicas por la repentina muerte de sus padres cuando era un niño; un crecimiento afectado por la culpa y el deseo de venganza, que posteriormente se transformó en deseo de justicia y protección para la ciudad en la que creció. Un tema que ya se había tocado en la película de Batman de 1989, cuando Vicky Vale pregunta "¿por qué lo haces? ¿Por qué tú?" y Bruce responde "Porque nadie más lo hace".

La Liga de las Sombras (elemento que nunca había aparecido en películas, pero importantísimo para las historias de Batman de los últimos 25 años, conocidos en los cómics como La Liga de los Asesinos) tomó un lugar preponderante al ser los encargados de entrenar a Bruce, principalmente el mercenario Henri Ducard (uno de los personajes que contribuyen a la formación de Batman en el canon comiquero), quien nos revela al comenzar la etapa final de la película que realmente es Ra's Al Ghul, el legendario comandante de esta organización terrorista.

Esta película se basó principalmente en los comics "Batman: Year One", "Batman: The Man Who Falls" (donde se narran sus viajes alrededor del mundo para entrenarse) y, en menor medida, "Batman: Year Two". Por fin se mostró al asesino de los padres de Bruce de acuerdo al canon, Joe Chill (en la Batman de 1989, el asesino había sido Joker) y muchos eventos de Year One -cómic creado por Frank Miller donde se narra el primer año de la aparición del hombre murciélago- fueron tomados directamente para la película. Batman, una figura simbólica pensada para crear terror en los criminales, había llegado por fin a hacer justicia en Gotham, una ciudad enorme conocida por su corrupción. El primero en sufrir las consecuencias es el mafioso Carmine Falcone y la élite corrupta de Gotham City. 

"Ladies, Gentlemen. You have eaten well. You've eaten Gotham's Wealth. Its spirit.Your feast is nearly over. From this moment on... none of you are safe".



Algunos pequeños pero bonitos detalles tomados de Year One: el dispositivo para atraer las bandadas de murciélagos y el final, cuando Gordon le muestra a Batman la carta de Joker como evidencia de un crimen.


(Antes de seguir me permito sugerirles que den click en las imágenes para verlas ampliadas, están bien bonitas y así).


Otro pequeño detalle que me gustó mucho de Batman Begins fue la aparición breve de Zsasz, homicida que disfruta haciendo una cortada en su cuerpo por cada persona que asesina.




La idea del agua de la ciudad envenenada con gas del miedo ya había sido utilizado por el mismo Scarecrow durante el arco narrativo de "Knightfall". De esa serie hablaré más adelante por la importancia que tiene como inspiración para el desarrollo de The Dark Knight Rises.



También hay una referencia la hermosa serie animada de Batman de 1992. En el primer capítulo que aparece Scarecrow ("Nothing to fear") absorbe su propio gas del miedo, viendo a Batman como una figura difusa y fantasmagórica de ojos crueles, justo como lo ven los envenenados habitantes de la ciudad.


Finalmente, Batman salva el día, a la ciudad, se erige como héroe y logra frustrar los planes de Ra's Al Ghul. Por lo menos en apariencia.

Un año después, comienza la narración de la siguiente película: The Dark Knight. Es reconocida por muchos críticos no solamente como una de las mejores películas de superhéroes (si no es que la mejor), sino que además es considerada como una gran película por méritos propios. La profundidad psicológica y los muchos matices de la relación Batman - Joker fueron muy bien logrados.

No voy a entretenerme mucho reseñando The Dark Knight. A estas alturas, hay cientos de análisis mejores que el mío pululando en todos los internets. Solamente voy a señalar algunos puntos que creo esenciales.

La inspiración para el Joker tan bien logrado por Heath Ledger viene de la famosa obra de Alan Moore "The Killing Joke". Ninguna parte de la novela gráfica fue tomada literalmente para la película (eso se hizo con "The Long Halloween" y "Batman N° 1"). Lo importante es que refleja el aspecto más desquiciado de Joker, y un posible origen para el mismo. Que nunca sabremos si es definitivo, porque en su locura Joker se reinventa constantemente. "A veces lo recuerdo de una forma, a veces de otra. Si he de tener un pasado, prefiero que sea de opción múltiple, jaja". También sostiene una teoría que resulta muy importante durante la trama de la película: el hecho de que solamente hace falta un mal día, un verdadero mal día, para convertir a un buen hombre en un lunático. Eso se lo indica a Batman, haciéndole notar que hay muy poca diferencia entre ellos dos; y durante la película (por ejemplo), cuando pone a prueba a los ciudadanos que están tratando de escapar de la ciudad en los barcos. Junto a Joker, la mafia se vuelve meramente anecdótica y hasta compasiva.





Sin utilizar recursos demasiado obvios ni irse por el lado más fácil, Nolan logró retratar el equilibrio entre Batman y Joker, el antagonismo perfecto... y al mismo tiempo, la fina línea que apenas los separa, pero que Batman, aún en el límite del dolor y de la desesperación, nunca cruza.

El Joker creado por Nolan e interpretado por Ledger tiene muchas frases memorables, a la altura de las mejores que haya dicho en cómics e incluso superándolas. Pero la que mejor resume todo el punto central de la película es ésta, cuando finalmente Batman lo atrapa, evitando su muerte:

Oh, you. You just couldn't let me go, could you? This is what happens when an unstoppable force meets an immovable object. You truly are incorruptible, aren't you? You won't kill me out of some misplaced sense of self-righteousness. And I won't kill you because you're just too much fun. I think you and I are destined to do this forever. 
Quien sí tiene su "mal día" y termina completamente desquiciado es Harvey Dent, el impecable fiscal, el incorruptible perseguidor de la mafia. Afortunadamente, Nolan tiene nuevamente el tino de no mostrar esta conversión como el producto de un desdichado instante, sino que va mostrando lentamente que Harvey es un perturbado y obsesivo, y que las múltiples situaciones de estrés extremo que enfrenta lo convierten finalmente en el clásico Two-Face. Por cierto, ahí aparece otra referencia a Year One: Batman termina salvando al hijo de Gordon en el último minuto.

Después de la estrecha colaboración con Gordon y la policía de Gotham, Batman se convierte en un forajido, un perseguido por la policía al atribuirse los delitos cometidos por Harvey Dent. Y es así que inicia su retiro, lo que nos lleva a The Dark Knight Rises... Ocho años después.

Gotham por fin es una ciudad próspera y casi totalmente libre de crimen. La buena memoria de Dent ha propiciado la creación de una ley que da facilidades para el arresto a miembros de la mafia (no se nos explica en qué consiste, pero me recuerda a la famosa Patriot Act de Bush por lo que puedo intuir). Batman ya no es necesario... en apariencia. Pero evidentemente, eso no puede durar.

Bruce Wayne se ha retirado del mundo como millonario filántropo misterioso recluido en su mansión, a la Howard Hughes. El peso de asumir la responsabilidad por los crímenes de Two-Face y la pérdida de Rachel Dawes (la única casi-pareja que tuvo en toda su vida durante esta trilogía, en los cómics ha tenido un chingo de viejas) a manos de Joker lo tiene sumido en la depresión, lo que lo lleva también a un evidente descuido por su cuerpo, lleno de cicatrices por sus enfrentamientos pasados. Este Bruce nos recuerda vagamente al de "The Dark Knight Returns", novela famosa también de Frank Miller, el mismo autor de Year One.

La nueva amenaza de Gotham es Bane, un misterioso mercenario cuyo objetivo al principio de la trama no es muy claro. Pero ¿quién es Bane? Para el neófito no es un personaje tan conocido y fácilmente identificable como lo fue Joker. Pues bueno, Bane es el personaje que crearon en los cómics exclusivamente para "quebrar al murciélago".




Durante la serie "Knightfall" (la inspiración mayor para este nueva película), Batman está en una depresión profunda. Hace un par de años, Joker, durante los eventos de "The Killing Joke" deja paralítica a Barbara Gordon (Batgirl). Después, escapa nuevamente de Arhkam y mata al eterno compañero de Batman, Jason Todd, el segundo Robin, durante los eventos de "A death in the family". Por si no fuera suficiente prueba para su psique, poco tiempo después Batman no logra salvar a una niña secuestrada, y se culpa a sí mismo por no tener la fuerza suficiente para haber logrado sacarla del lugar donde estaba recluida a tiempo para que no muriera ahogada. Se hace adicto a un nuevo y poderoso esteroide para poder aumentar su fuerza, conocido simplemente como "Veneno", y la adicción lo lleva casi a la locura; aunque logra sobreponerse, como siempre.

Sin embargo, su espíritu está ya parcialmente quebrado. Continúa su lucha contra el crimen, pero en un estado cada vez más lamentable. Durante ese periodo, Bane llega a Gotham con solamente un propósito: destruir a Batman y apropiarse de su ciudad. Bane nació en una prisión de alta seguridad de un país ficticio del Caribe (Santa Prisca). Ahí vive y crece en la casi total oscuridad, aprende a vivir con la amenaza constante de la muerte y a defenderse de otros reos, al mismo tiempo que se transforma en un ávido lector; consigue muchos libros con los que se convierte en autodidacta. En esa prisión se entera de la existencia de Batman, y derrotarlo se vuelve su obsesión. Escapa de la prisión al ofrecerse como voluntario para una nueva versión del esteroide Veneno que usó Batman, aún más refinada y que otorga más fuerza y ferocidad al consumidor.


Ya saben, click para ampliar

Para probar los límites de Batman, Bane bombardea la prisión Arkham para enfermos mentales, donde están recluidos la mayoría de los peores enemigos de Batman. La policía se ve superada, y el mismo Batman va perdiendo fuerzas y energía ante el reto que tiene enfrente, añadido a su cansancio físico y emocional previo. Bane ya ha deducido su identidad secreta, y cuando considera que Batman ya llegó a su límite mental, lo espera en su mansión, donde le pone la madriza de su vida, que culmina con esto...



Si les suena parecido al plot de The Dark Knight Rises, definitivamente no es casualidad. La interpretación de Tom Hardy como Bane es una maravilla de crueldad. "Mato por todo. Para silenciar una voz. Para cegar a quien osa mirarme". La escena en la que quiebra a Batman destaca por su efectividad y su crudeza, a diferencia del dramatismo casi Wagneriano del cómic. 

Una de las críticas más frecuentes que he escuchado entre los conocedores de la mitología de Batman es que éste es el mejor detective del mundo y no se lanzaría a combatir a Bane sin saber casi nada de su pasado. Eso es un error. Nolan entendió perfectamente "Knightfall"; sabe que durante su depresión Bruce es impulsivo y busca su muerte heroica en el afán de salvar a su ciudad; cree que no tiene límites o prefiere ignorarlos y ataca descuidadamente, sin hacer análisis previo, por mera reacción ante la situación de emergencia.



Otra situación que casi todo el mundo esperaba era la muerte de Bruce Wayne en esta película. ¿Por qué? Porque Batman es un símbolo anónimo. Se elaboró una interesante teoría antes del estreno donde se preveía esto. Bruce Wayne muere a manos de Bane, otro toma su lugar y destruye a Bane... the dark knight rises. En otra persona.

Pero nuevamente ignoran que Nolan respeta muchísimo más la mitología de los cómics que lo que muchos creen. El deseo de Bane es acabar con Batman, pero no matarlo. Por lo menos no de inmediato. ¿Por qué? Porque eso "solamente terminaría con tu agonía, aliviaría tu vergüenza". Muy parecido a lo que le dice a Bruce durante la película cuando  lo aprisiona y lo obliga a contemplar la paulatina destrucción de su ciudad: "When Gotham is in ashes, then you have my permission to die".

¿Cómo alguien como Ra's Al Ghul, un fanático de la "justicia" del ojo por ojo, elige a un maniático como éste para ser parte de la Liga de las Sombras? Eso podemos observarlo durante "Legacy".

Durante la saga Legacy, Ra's suelta una plaga (una variante del virus Ébola, conocida como Ébola Golfo-A) sobre Gotham (esta parte se conoce como "Contagion"). Prueban primero su efectividad en la ciudad (a través de otra organización, la Orden de San Dumas) y al comprobar su elevado nivel de mortandad (aunque Wayne Enterprises logra sintetizar una cura) decide "limpiar a la tierra" con ese nuevo virus. Cuando Batman se apresura a detenerlo, se revela la identidad del nuevo ayudante de Ra's:



Bane está obsesionado con tener el control del nuevo mundo que limpiaría Ra's, ser su heredero... y de paso quedarse con su hija, Talia. Está dispuesto a morir por la cruzada de la Liga de los Asesinos. Se vuelve un títere más de Ra's Al Ghul, y en menor medida, de Talia.

Aquí va un pequeño paréntesis: Talia Al Ghul, en el canon de Batman, es su pareja más duradera. Se conocen antes de que Batman sepa todo sobre Ra's y su organización, y aunque ambos están enamorados, no pueden estar juntos porque Talia tiene un respeto y obediencia absolutos hacia su padre. No porque la obligue, sino porque, como le dice a Bruce durante el crossover Batman & Spider-Man: "Así lo he decidido".

Aquí es uno de los puntos donde más flaquea The Dark Knight Rises. Marion Cotillard encarna a una Talia poco convincente (con un previsible twist casi al finalizar). Nolan, quizá por pura reminiscencia, nos muestra un acostón entre ella y Bruce bastante innecesario para la historia (Bruce ya confiaba en ella... aunque bueno, ocho años sin coger es demasiado tiempo) que carece por completo de la pasión contradictoria que realmente tienen estos dos. Quizá lo único rescatable es el mostrarnos a ella y a Bane como parte de un plan maestro para destruir Gotham aunque ambos perezcan en el proceso. Lo hacen juntos y morirán juntos. Y también vemos una "humanización" de un Bane ¿enamorado? de Talia, diferente a lo que ocurre en Legacy, donde éste más bien se obsesiona con su físico y con "poseerla".

También durante Legacy aparece el segundo enfrentamiento en forma entre Bruce Wayne y Bane. Aquí Bruce ya está completamente recuperado después de los sucesos de "Knightquest" (donde, por cierto, Alfred renuncia) y "Knightsend" (en este último, tuvo que derrotar a quien había nombrado como su sucesor, Jean Paul Valley, A.K.A. Azrael, que se había tornado excesivamente violento en su papel de Batman). Bane ya no enfrentaba a un Batman física y moralmente debilitado, sino al estratega frío y calculador, en perfectas condiciones. El resultado de la pelea es obvio. Aunque Bane toma la ventaja, Batman gana.





                           "I am not afraid. I'm angry". Justo lo que dice ahí arribita.

Va otra referencia: El Estado de Excepción en Gotham, cuando cortan todo acceso y comunicación a la ciudad, cediendo a las demandas de Bane, es una analogía directa de la serie "No Man's Land". Después de la plaga de Ra's, Gotham enfrenta un terremoto (la serie donde ocurre se llama "Cataclysm") y los considerables y costosos daños que provoca hacen que el gobierno de EEUU declare fuera del país a esa ciudad tan problemática y propensa al caos, una "Tierra de Nadie" que dura un año y culmina con otra muerte de un personaje importante para el comisionado Gordon a cargo de... sí, adivinaron: Joker, nuevamente; y con Batman restableciendo el orden y logrando que la ciudad se reintegre al país.

Y llegamos al  tan criticado -por algunos- final de la saga: Bruce finge su muerte (referencia al final de The Dark Knight Returns), cansado de ser Batman. A fin de cuentas, Batman es un símbolo y cualquiera con las agallas suficientes y la responsabilidad puede tomar su lugar. Esto lo vemos también en la serie de T.V. "Batman Beyond", por ejemplo, donde aparece un Bruce anciano que ya no puede cargar la capa. Y durante Knightsend, Bruce le confiesa a Tim Drake, el nuevo Robin, que hasta saber lo violento que era Jean Paul como Batman había pensado retirarse definitivamente. 




Bruce encuentra con quién pasar una tarde tranquila, con quién tener un final feliz. Y ese alguien es Selina Kyle, a quien todo mundo ve como la pareja ideal para Batman, a pesar de que su relación más fuerte es con Talia. Catwoman, la ladrona. Cabrona, ojete, aventurera, pero al final, compasiva. De "buen corazón". Cuando la situación ha sido casi incontrolable para Gotham, ella permanece del lado de "los buenos". Por ejemplo, durante "Contagion" decide quedarse en la ciudad para ayudar a los enfermos, aún a riesgo de contagiarse y a sabiendas de que no obtendrá ningún beneficio económico. 

Se ha comparado mucho la interpretación de Michelle Pfeiffer con la de Anne Hathaway como Catwoman. Desde mi punto de vista no tienen casi nada que ver mas que en el nombre. La actuación de Pfeiffer fue brillante y mostró a una Catwoman con esquizofrenia atroz, desesperada, borderline. Anne actúa mucho más parecido a la Catwoman de los cómics. Ve para sí misma, toma lo que quiere, es calculadora y aparentemente sin escrúpulos, pero en el momento de máxima crisis está para ayudar. Un detalle para apreciar: durante Dark Knight Rises, nunca la nombran "Catwoman", simplemente se ve en los periódicos que revisa Bruce como "The Cat", el cual era su nombre original.




Last but not least, tenemos al policía John Blake, el único personaje relevante totalmente inventado para esta película. Su papel como soporte y como "believer" de Batman es indispensable para la saga porque él está destinado a convertirse en el nuevo héroe protector de Gotham. Él será Batman, y nadie más, a pesar de la referencia casi cómica a su nombre legal "Robin" al final (y actúa como una especie de Robin, efectivamente: Bruce confía en él como un compañero capaz). No será Robin, no será Nightwing, no será Azrael: tomará el manto del murciélago. Un detalle que se me pasó y que me recordó el Gab: su ropa tiene un ligero parecido con el traje de Nightwing.

Los roles secundarios de Alfred Pennyworth, James Gordon y Lucius Fox tuvieron una fuerza inesperada gracias sobre todo a sus actores (Michael Caine, Gary Oldman y Morgan Freeman, respectivamente) que son gigantes de Hollywood que conocen su trabajo a la perfección. Cualquiera que se aproxime a las películas sin conocer el cómic se sorprendería de saber que Lucius Fox es un personaje más bien anodino; sí es inteligente, es la mano derecha de Bruce Wayne en la directiva de su empresa, pero hasta ahí. La evolución de James Gordon desde patrullero hasta comisionado de policía está muy bien retratada por Gary Oldman (se perdona el hecho de que Gordon debería ser un hombre mucho más corpulento a cambio de la magnífica actuación), así como su relación con Batman; y Alfred... el Alfred de Michael Caine es fantástico. Siempre preocupado por el pequeño huérfano que quedó a su cargo, siempre fiel, siempre angustiado por la misión de Bruce (aunque lo oculte tras un delicioso y fino sarcasmo inglés), siempre buscando ser el mejor padre sustituto posible... aunque su educación como mayordomo le impida un acercamiento más cariñoso, más paternal, dirigiéndose a Bruce invariablemente como "amo". Cuando llora frente a la tumba de Bruce y le pide perdón al Dr. Thomas Wayne uno no puede evitar sentir compasión por el anciano mayordomo y querer abrazarlo; decirle que crió a una de las mejores personas de la tierra y que no podría sentirse más orgulloso de haber contribuido a formar al héroe.

The Dark Knight Rises no es una película pesimista. Es la otra cara de la moneda de The Dark Knight: después de todas las adversidades, Batman siempre vence. Muy en la línea moralista-política de Nolan, pero también muy respetuosa del canon final de Batman, que gana sin importar el adversario que tenga enfrente. Carajo, le ha puesto palizas hasta a Superman. He is The Goddman Batman.


Batman nunca se rinde. ¿Por qué se rendiría al alivio de la muerte después de llevar el mundo a su espalda? La muerte de éste (y cualquier otro Batman) en combate es más contradictoria de lo que parece, a menos que de verdad no hubiera ninguna otra salida.

¿Qué nos lleva a querer que el héroe muera siempre? ¿No tiene derecho a una vida "normal"? ¿Por qué a tantas personas les molestó? Sé que a muchos fans de Batman les puede parecer anticlimático y anticanónico que tenga un "final feliz". Pero es uno de los muchos mundos posibles, como el que le ofrece Hal Jordan a Bruce durante los eventos de Zero Hour. Toda la trilogía de Nolan gira en torno a las palabras de Thomas Wayne: "Why do we fall?" Si Bruce Wayne no logra levantarse y superar la muerte de sus padres, también habrá fracasado. Como ser humano, no como héroe. Deja su legado, deja a Batman, cuyo lugar será tomado por alguien más. Y puede continuar. Por eso vemos a Catwoman tratando de reiniciar su vida. En contraste, por eso vemos a Harvey perderse en el abismo. Por eso Joker retrata profundidades horrendas, pero que sabemos posibles. Por eso Bane llora ante Talia. Es la humanización que nos presenta Nolan; en algunos casos mejor lograda que en otros, por supuesto. Quizá habrá a quien le parezca que, después de una vida tan heroica, terminar tomando Cabernet y comiendo pasta en un restaurante en Italia es demasiado burgués; pero recordemos que ése era el "destino" original de Bruce Wayne de no haber perdido a sus padres. Tiene derecho a experimentar eso. No estoy seguro si a quienes les incomoda es por un desacuerdo real con semejante "way of life" o por su incapacidad para lograr algo parecido en su vida. Porque si se trata de incongruencia con la trama, ya vimos que no hay tal.

Alguna vez leí que los cómics son el equivalente a la mitología griega de héroes y dioses en la actualidad. Considero que -con sus matices- semejante afirmación tiene sentido. Recordando la frase del teaser preventivo de The Dark Knight Rises "Every hero has a journey... every journey has an end" les recomiendo leer "El héroe de las mil caras" de Joseph Campbell. Ahí se presenta, estudiado por primera vez con rigor, este concepto, el viaje del héroe. Aprenderán mucho sobre la formación de mitos y leyendas sobre los héroes, mis pequeños saltamontes.

¿Yo? Yo estoy feliz con los resultados de esta película. Ah, sí: si les parece que tiene poco rigor científico y por eso no les gusta, mi consejo es que desconecten un rato el cerebro. Al final, es una historia basada en un cómic sobre un adulto que se disfraza de murciélago para combatir criminales. Tratan de hacerla de un modo más o menos realista y "serio", por supuesto. Ra's Al Ghul no es inmortal mas de que manera simbólica. Joker no tiene la piel permanentemente blanca. En el cómic, la recuperación de Batman tarda muchos meses porque Bane le fractura una vértebra; aquí "solamente" se la desvía... evidentemente para ahorrar tiempo en la historia llevada al cine. La improbable bomba atómica de fusión... bueno, he visto tramas mucho más ilógicas en cualquier historia que involucre a toda la legión de superhéroes de DC o Marvel.


The Dark Knight Rises no es una obra de arte. Quien diga eso es que conoce poco de cine. Es una película efectiva, entretenimiento simple (que nos hace reflexionar en ocasiones) muy bien llevada a cabo. Una conclusión épica y emocionante para una saga, con todas las peleas que siempre quisimos ver actuadas, sobre el héroe favorito de mi infancia. El mejor Batman posible en el mundo del cine.





P.D. La escena de Catwoman desapareciendo de la vista de Batman (como él siempre lo hace) y las palabras que dice éste fueron tomadas de "Kingdom Come", sólo que ahí fueron dichas entre Batman y Superman. Es un "elseworld" (futuro alterno en los comics) que no tiene mayor relación con las películas, pero el guiño me gustó mucho. I CAME.




P.D.2 Unita queja: Michael Keaton es mejor Batman que Christian Bale. Como Bruce Wayne, es al revés. La voz de perro ronco de Bale no le va al personaje. Es mucho mejor la voz de Kevin Conroy en la serie animada. Se las regalo aquí.

5.7.12

Elogio de la ociosidad (en defensa de una hueva ilustrada)



El título me lo robé de Bertrand Russell.

Sí, últimamente me he estado robando muchos títulos. Bueno, siempre lo he hecho. Es que los títulos son difíciles, ¿saben?

Bertrand Russell ha sido uno de los genios más grandes de la historia. No solamente del siglo XX. Fue escritor, filósofo, matemático y activista social y político. Autor de los "Principia Mathematica" (obra importantísima sobre matemáticas, fundamental entre los que conocen del tema). Desarrolló novedosas teorías pedagógicas, explicó la teoría de la relatividad de Einstein al gran público, luchó por los derechos de las mujeres, dio numerosas aportaciones a la "filosofía analítica", a la epistemología, la ética y la filosofía del lenguaje; promovió la educación sexual, el control de la natalidad y el pacifismo. Las malas lenguas dicen que era tan pitudo que podía darle la vuelta a su pantalón con su virilidad, lo que lo dejaba sin la necesidad de utilizar cinturones.

(Lo último puede que carezca de precisión histórica y sea solamente una suposición del autor).


Sir Bertrand Russell, también conocido como "el englishman más cabrón del universo".

En 1932, este señor escribió un pequeño ensayo llamado "Elogio de la Ociosidad". Permítanme compartirles unos pequeños fragmentos, mis pequeños saltamontes:


"La idea de que el pobre deba disponer de tiempo libre siempre ha sido escandalosa para los ricos. En Inglaterra, a principios del siglo XIX, la jornada normal de trabajo de un hombre era de quince horas; los niños hacían la misma jornada algunas veces, y, por lo general, trabajaban doce horas al día. Cuando los entrometidos apuntaron que quizá tal cantidad de horas fuese excesiva, les dijeron que el trabajo aleja a los adultos de la bebida y a los niños del mal. Cuando yo era niño, poco después de que los trabajadores urbanos hubieran adquirido el voto, fueron establecidas por ley ciertas fiestas públicas, con gran indignación de las clases altas. Recuerdo haber oído a una anciana duquesa decir: "¿Para qué quieren las fiestas los pobres? Deberían trabajar". Hoy, las gentes son menos francas, pero el sentimiento persiste, y es la fuente de gran parte de nuestra confusión económica.
El sabio empleo del tiempo libre -hemos de admitirlo- es un producto de la civilización y de la educación. Un hombre que ha trabajado largas horas durante toda su vida se aburrirá si queda súbitamente ocioso. Pero, sin una cantidad considerable de tiempo libre, un hombre se verá privado de muchas de las mejores cosas. Y ya no hay razón alguna para que el grueso de la gente haya de sufrir tal privación; solamente un necio ascetismo, generalmente vicario, nos lleva a seguir insistiendo en trabajar en cantidades excesivas, ahora que ya no es necesario.
Es más, soy tan buen pedo que aquí les dejo el enlace completo para que se avienten todo el texto. Son solamente siete páginas de una brillante defensa del ocio.

¿A qué viene todo esto? Como ustedes sabrán, en estos convulsionados tiempos políticos (ja) han aparecido cientos de manifestaciones (a veces dos o tres marchas por día), sobre todo en esta su ciudad capital grandota de este confuso país. Las buenas conciencias han tenido a bien repetir como merolicos el siguiente mantra:

"Que se pongan a trabajar en lugar de andar marchando".

Lo anterior es pronunciado con gesto de asco (a.k.a. huelepedos) montados en el tabique de una superioridad moral infumable y como si estuvieran revelando la verdad absoluta del universo a un montón de retrasados mentales. Esta imbecilidad tiene muchas variantes: "que nos dejen paso a los que sí trabajamos", "si esos fueran estudiantes estarían estudiando en sus casas en lugar de andar de revoltosos", "yo sí trabajo y produzco en lugar de andar en marchas", "tu éxito depende de tu trabajo particular, no de exigirle cosas al gobierno" y así ad pendejitum.

En primer lugar, llama la atención que la mayor parte de la gente que dice "que nos dejen pasar a los que sí trabajamos" suelen ser Godínez come cheetos que llegan a su oficina para chismear del futbol, verle las nalgas a la recepcionista, jugar solitario o farmville en Facebook mientras checan su perfil a escondidas del jefe, o que activan el msn para parlotear idioteces y buscar el próximo lugar para embriagarse el fin de semana. Actitud Godínez 100%.

Pero, antes de continuar ¿Qué es un Godínez, conocido anteriormente como Gutierritos? Pues el tipo de persona que tiene las actitudes que mencioné antes en su entorno laboral, que "trabaja" 10 horas diarias para evitar el tedio de ver a su familia e hijos (con quienes no sabe convivir), que busca gastarse media quincena en alcohol y "el table" con los cuates porque no conoce ninguna otra forma de diversión o esparcimiento y que es incapaz de ver un poco más allá de sus limitadísimas aspiraciones, donde un ascenso de área constituye el máximo logro laboral (y por lo tanto, vivencial, ya que no conoce ninguna otra clase de logros). Atentos: no estoy diciendo que el trabajo de oficina sea necesariamente enajenante o que todos los oficinistas sean así, pero suele ser una actitud bastante frecuente. Y lo es porque no existen incentivos que permitan a esos trabajadores relacionarse de otras formas con su entorno.

¿Realmente es necesario que un trabajador permanezca más allá de ocho horas en una oficina? ¿Realmente trabaja durante todo ese tiempo? Lo dudo muchísimo. Por experiencia personal sé que no se pueden trabajar más allá de siete horas a toda la capacidad posible; después de ese tiempo, los errores humanos aumentan, uno debe levantarse de su silla, descansar los ojos, buscar alguna distracción aún mínima durante unos minutos.

Regresando al punto de las marchas: ¿qué les hace pensar, oh imbéciles, que las personas que participan (o hemos participado) en una manifestación no trabajamos? Quizá no se les ha ocurrido pensar que somos más productivos que muchos de ustedes, y que simplemente organizamos mejor nuestro tiempo y eso nos permite realizar el trabajo que nos toca Y ADEMÁS poder participar en una manifestación cultural o de descontento social. ¿Por qué asumen que todos somos tan brutos como ustedes, que no saben organizar y administrar sus horas de trabajo o que permiten los abusos constantes de un jefe que los obliga a permanecer en oficina incluso en momentos en los que no hay labores por realizar? Las protestas y manifestaciones existen por una razón: la gente que trabaja en el gobierno obtiene su salario de los impuestos que pagamos todos; por lo tanto, estamos en todo el derecho de exigirles que hagan su trabajo y no dejarlos a la deriva, con el pretexto bobo de que "el presidente no determina si tienes éxito o no". Un buen gobierno favorece las condiciones económicas que permitan la creación de buenos empleos y buenas empresas. Por eso se les exige (entre muchas otras cosas) que cumplan con sus responsabilidades.

Por otra parte, está la gente que sí trabaja mucho. Que el tiempo que pasan encerrados en sus oficinas o negocios particulares lo dedican total e íntegramente al trabajo duro de tiempo completo. Y esas personas -siento mucho decirlo- me provocan un poco de lástima.

Suelen estar muy orgullosas de su trabajo (por lo regular, no tienen nada más que presumir) y la idea del descanso les parece propia de personas poco inteligentes, irresponsables o flojas. Para mí, representan el culmen del esclavo satisfecho con su condición, como una especie de Tío Tom posmoderno (que en su momento fue necesario, pero ya no más), como burros trabajando en una rueda de molino pero felices por los latigazos que reciben y por ser un importante engrane de la maquinaria, satisfechos de que su esfuerzo sea reconocido y de ninguna otra cosa, porque no tienen más satisfacción que la que proviene del trabajo. Welcome to the machine.



Another industrial ugly morning
The factory belches filth into the sky

He walks unhindered through the picket lines today
He doesn't think to wonder why
The secretaries pout and preen like
cheap tarts in a red light street
But all he ever thinks to do is watch
And every single meeting with his so-called superior
Is a humiliating kick in the crotch
Many miles away
Something crawls to the surface
Of a dark Scottish loch



Another working day has ended
Only the rush hour hell to face
Packed like lemmings into shiny metal boxes
Contestants in a suicidal race


Esa gente también suele esgrimir como argumento irrefutable y dogma que el trabajo salvará al país, que lo sacará del atolladero en el que se encuentra. "Las manifestaciones no sirven, lo que importa es ponerse a trabajar". Y ahí van a partirse el lomo, creyendo que con su trabajo mecanizado y gris realmente están logrando un cambio para el país, sintiéndose importantes y superiores al resto porque lograron adquirir un coche en pagos en plazos de dos años, muebles a crédito, teléfonos y aparatos electrónicos de última generación (también a crédito) y pagando rentas infernalmente altas para vivir en una "zona bien", creyendo que si queda un gobierno con una mínima tendencia de izquierda será "comunista" y les quitará "su riqueza" que, en realidad, ni siquiera es propia, sino del banco.






Me gustaría ver que un día hicieran el trabajo duro de un campesino o de un albañil, por ejemplo. Levantarse al amanecer y hacer trabajo físico de sol a sol por una paga mínima. ¿Ese es el trabajo salvador? Esas personas han trabajado duro toda su vida, y no veo que les sirva para mejorar su nivel de vida, que "progresen" por estar trabajando siempre y a todas horas.

Y es que eso forma parte de otro tema que da para un post entero. La idea del progreso como una mejora de las condiciones de vida. Un buen día, a un botarate se le ocurrió que para vivir mejor debemos tener permanentemente todas las "comodidades del mundo moderno", aparatos por todas partes para compensar obvias carencias afectivas (mami mami mami). "Fuck off with your sofa units and strine green stripe patterns, I say never be complete, I say stop being perfect, I say let... lets evolve, let the chips fall where they may."

El trabajo es necesario en la medida en que nos permita obtener cosas útiles para nuestra susbsistencia y entretenimiento. Y nada más. ¿Realmente necesitan todo el resto? ¿Por eso se la pasan quince horas encerrados en una oficina, medio comiendo, medio durmiendo y medio viviendo?

Advertising has us chasing cars and clothes, working jobs we hate so we can buy shit we don't need. We're the middle children of history, man. No purpose or place. We have no Great War. No Great Depression. Our Great War's a spiritual war... our Great Depression is our lives. We've all been raised on television to believe that one day we'd all be millionaires, and movie gods, and rock stars. But we won't. And we're slowly learning that fact. And we're very, very pissed off. 
El asunto aquí es que todavía no los veo enojados por tener que vivir así. Les encanta lamer profusamente las suelas de quienes les proporcionan una mísera parte de la riqueza que generan ustedes mismos, porque así pueden sostener sus "lujos".

Tener lo necesario no equivale a ser un apestoso hippie comeflores, sino a adquirir lo que ocupas y realmente quieres sin tener que cambiar de producto cada tres meses, sin ser un dependiente de la obsolescencia programada. Porque eso es, al final, lo que ata a muchos al trabajo sin fin. 

Esa "ética del trabajo duro" de las buenas conciencias suele ser parte de un mecanismo de compensación a una vida sin sentido. Les suplico por anticipado detengan el mame que ya sé que viene: obviamente existen personas que dedican todo su tiempo a un trabajo, pero PORQUE ES LO QUE LES GUSTA. Es a lo que se dedicarían de todas formas, les redituara o no. No se trata del dinero, no se trata de trabajar y trabajar como única forma de obtener satisfacciones personales; se trata de encontrar el modo en que el trabajo sea una más de esas satisfacciones y no el todo. 

Así es que relájense, seres laboriosos; detengan su perpetua succión de elongados miembros viriles (o continúenla, si son buenos en eso), salgan a caminar, ver películas, escribir o hacer cualquier otra cosa que les guste. Sí, que les guste, no que les obligue el trabajo a ello.

¿Saben por qué la jornada laboral establecida en la ley federal del trabajo es de ocho horas? "Ocho horas para el trabajo, ocho horas para la recreación, ocho horas para el descanso". Les convendría aplicarla de vez en cuando. Y exigir que en su empresa lo hagan. De verdad, su obtuso cerebro se los agradecerá. Quizá al principio solamente se la pasen comiendo  fritangas mientras ven la tele durante horas, pero probablemente después les den ganas de hacer algo más. Y serán más felices. O algo.

Ah, por cierto: Russell participó en muchas manifestaciones y marchas. Aquí les dejo foto de una:

Ahí, justo al centro, está sentado Bertrand "Ultrachingón" Russell

Estaría bien cotorro que le hubieran dicho "¡que se ponga a trabajar y que haga algo de provecho!" Los logros de Russell fueron producto de su ocio bien administrado. Aprendan algo, botarates.


"Los métodos de producción modernos nos han dado la posibilidad de la paz y la seguridad para todos; hemos elegido, en vez de esto, el exceso de trabajo para unos y la inanición para otros. Hasta aquí, hemos sido tan activos como lo éramos antes de que hubiese máquinas; en esto, hemos sido unos necios, pero no hay razón para seguir siendo necios para siempre."

Los dejo para que trabajen en paz, mis buenas y trabajadoras conciencias. Abur.

P. D. Otra favorita en estas extrañas épocas post electorales: "el cambio no lo hace un presidente, lo haces tú no dando mordida, respetando los altos, etc. blablabla". Acto seguido, esa gente es la que sigue cuentas en twitter y facebook que les indican la ubicación de los alcoholímetros. Muy respetuosos de las leyes... que les convienen, porque el resto les vale ocho kilos de pito reseco en rebanadas. Como decimos entre los miembros de la realeza: esas personas son puro pájaro nalgón. I rest my case.

4.5.12

Avengers (o de la película de superhéroes por antonomasia)


Yo siempre preferí DC.

No es que lo hubiera elegido conscientemente. A todos los niños pequeños les gusta Superman. El hombre todopoderoso que puede volar y es muy fuerte y protege a todo el mundo. Pero quien realmente me voló la cabeza fue Batman.

Era 1989. Había salido una nueva película de Batman. Yo era un mocoso de seis años entrando a la primaria. Y me gustaba el personaje, en parte por la famosa serie del batitwist y el PAM!WHOW!KAPUT! (la veía a los 5 años, déjenme en paz, admiradores de Kieslowski) y los dibujos animados de Hanna - Barbera. Pero realmente no estaba preparado para lo que vería. Esta fue mi reacción al terminar de ver Batman:


Desde entonces mi personaje favorito fue Batman. De hecho, uno de los momentos más traumáticos de mi niñez fue ver caer a mi ídolo solamente cuatro años después de esa maravillosa película de 1989 (y un año después de esa otra pequeña maravilla que fue Batman Returns). Ver caer a Batman a manos de un luchador hiperdesarrollado y con cara de pujido enojado fue duro, muchachos, muy duro.

(Se aleja con el viento)

Ah, pero que estamos hablando de otra cosa, pues. Mi interés sobre Marvel fue puramente tangencial al principio. Mientras me hacía conocedor de los eventos de la muerte de Superman, reino de los Supermanes, la caída del murciélago y Hora Cero, en Marvel también pasaban cosas interesantes. Uno de mis amigos coleccionaba X-Men y gracias a eso vi esta igualmente traumática escena:

Solamente pensé: "auch, eso debe doler"

De una forma u otra también fui conociendo Marvel. Debo decir que gran parte de lo que aprendí en ese momento fue gracias a las Pepsi Cards, ese maravilloso invento de la refresquera para tenernos esclavizados comprando tarjetas y tarjetas y tarjetas y... entendieron el punto.

Había algunas historias maravillosas que involucraban una gran cantidad de personajes. Estaban las "Secret Wars" de Marvel o "Panic in the Sky" de DC, donde el peligro era tan desproporcionado y enorme que prácticamente todos los héroes de la tierra se unían para combatir a una gigantesca amenaza decidida a acabar con la tierra (o con el universo, dependiendo del poder y del humor del villano en turno). Hubo maravillosas series de caricaturas de Spider-Man y X-Men y en esa misma época. Pero ya no había películas. Después de las dos películas de Burton sobre Batman, produjeron una mala y otra peor que, por respeto a éste que es un blog decente y donde no se admiten sectas, ni siquiera mencionaré.

Les dije que no quería hablar de BATMANCONPEZONESWAAAARGGH! 

¿Y Marvel? Nada. No había películas de superhéroes de Marvel... hasta el año 2000.

Llegó este tipo (y los otros que lo acompañan, en una película que creo que se llamó "Wolverine y sus sorprendentes amigos"):


X-Men y, posteriormente, Spider-Man, fueron el punto de partida para el boom que estaba por venir de películas de superhéroes. Aunque hubo algunos fracasos taquilleros (Hulk de Ang Lee y Daredevil en 2003, Ghost Rider con el infumable Nicolas "Carisma" Cage y Green Lantern más recientemente) en general han dado resultados muy positivos. Aunque fue a partir de Iron Man y la aparición de Nick Fury en la ahora ya famosa escena postcréditos lo que nos dio a todos los fans indicios de que algo muy grande estaba por venir...


Marvel ha sabido llevarnos de la manita ligando película tras película (que ya debieron haber visto si están leyendo esto) hasta alcanzar el punto culminante en Avengers. ¿Quieren saber mi opinión de Avengers?



¡¡¡ES LA PINCHEMADREMENTE MEJOR PELÍCULA DE SUPERHÉROES DE LA HISTORIA!!!



Hagamos de lado por un momento al Batman de Nolan. ATENCIÓN/DISCLAIMER/ADVERTENCIA: NO ESPEREN UNA RESEÑA IMPARCIAL SOBRE LOS MÉRITOS CINEMATOGRÁFICOS Y ARTÍSTICOS DE AVENGERS. Si quieren leer una crítica "formal" y "seria", vayan a clavarse en la textura de esta horrendísima cosa publicada en Letras Libres. Van mis comentarios libres de spoilers ahora, sí.

Considero que una película de superhéroes debe juzgarse de forma diferente a otras cintas "serias". Aquí va un comentario frecuentemente escuchado que, en mi nada humilde opinión, es basura :

"Ash, es que todo se ve como muy irreal, o sea, ¿cómo llegan justo a tiempo para salvar/detener/atacar tal o cual cosa?"

...
.....

PUES CLARO, GRANDÍSIMO IMBÉCIL. NO PUEDES ESPERAR LÓGICA PURA Y DURA DE UNA PELÍCULA CUYOS PROTAGONISTAS SON UN DIOS ASGARDIANO, UN HOMBRE CON SERIOS PROBLEMAS DE MANEJO DE LA IRA QUE SE TRANSFORMA EN UN INVENCIBLE SER VERDE POR CULPA DE UNA RADIACIÓN MISTERIOSA Y UN SUPER CIENTÍFICO ULTRAMILLONARIO QUE COMBATE MALVADOS ENEMIGOS EN UNA ARMADURA DE ALTA TECNOLOGÍA.


Para hablar de una película de comics tiene que gustarte el tema y que te apasione. Porque yo lo digo y se callan. Ser un niñote, si quieren verlo de ese modo. Y yo soy lo suficientemente niñote e inmaduro como para hacerlo, bitches.

¿Por qué creo que Avengers es la mejor película de superhéroes de la historia? Porque TIENE DE TODO. Todo lo que vimos en los comics está ahí: el duelo de egos entre los héroes, el conflicto moral sobre lo que está bien y lo que está mal (y hasta qué grado el fin justifica los medios) y que, al final, siempre superan esos conflictos para unirse por el bien ante la mayor amenaza que haya caído sobre la humanidad... hasta que lleguen seres aún más terribles y poderosos.

Vayamos a los personajes. Captain America es encarnado por un actor anodino y lineal. Pero no hay problema con ello: el personaje es anodino y lineal. Siempre en la búsqueda de la verdad, la justicia, la libertad y el sueño americano. El defensor del "American Way of Life" como la única forma correcta de vivir disfrazada de justicia real. Iron Man, en cambio, lleva eso mucho más allá: también representa el protectorado de un nuevo sueño americano, de la ideología del triunfo como la única válida. Es, por tanto, más cínico, más despreocupado y mucho más carismático que el simplón de Steve Rogers: Tony Stark es, como bien se lo dice en una de las escenas, algo más que un simple hombre en una armadura. Genio, filántropo, millonario y conquistador. Representa lo que le gustaría ser a un buen sector de la población gringa: easy-going, sabedor de que sus millones lo protegerán de cualquier acto imprudente o demencial que quiera llevar a cabo. Popular. Definitivamente, un personaje mucho más redondo que incluso llega a permitirse actos de auténtico heroísmo por los muchos otros de egoísmo burlón y cínico. En un momento dado, la confrontación entre estos dos me recordó a Civil War y la lucha simbólica entre el nuevo y el viejo sueño americano.

You know, this.

Black Widow compensa la carencia de superpoderes con sus fantásticas habilidades de espía (claro, el hecho de estar enfundada en un traje de spandex el 90% de la película también es bastante de agradecerse). Un detalle fantástico: Loki, el villano de esta historia, es considerado como el dios del engaño en la mitología nórdica. Black Widow jode al mismísimo dios del engaño manipulándolo magistralmente. What a bitch.

FUCKYEAH

Ahora vamos a los personajes realmente poderosos: Thor, dios del trueno y medio hermano de Loki. No es especialmente brillante, pero al igual que en el caso de Captain America, el actor encaja perfecto en su papel. No necesita ser mucho mejor actor porque Thor es un personaje simple: las cosas están bien o mal desde el punto de vista asgardiano y si considera que algo está mal lo arregla a puñetazos. Y last but not least... Hulk. 

La interpetación de Hulk a cargo de Mark Ruffalo es brutal. Logra encarnar a la perfección a un tranquilo (y hasta cierto punto burlón y mordaz) Bruce Banner, que se lleva las mejores líneas de la película. "That's my secret, Cap... I'm always angry" y, por supuesto "Puny God!" después de vapulear miserablemente a Loki. Siempre ha sido un personaje maravilloso y ahora lo explotaron como realmente se merece. Bruce Banner es todo un hombre y no me explico que clase de mujer no aceptaría tener sus verdosos, fibrosos y encantadores hijos.



Loki, a pesar de ser un villano un tanto menor en el universo Marvel e incluso un poco caricaturesco en ocasiones estuvo bastante bien. Sobre todo porque sabemos que es un mero peón de el auténtico malo malo malote que está detrás de su ejército. Para los que aún tengan duda del porqué fue elegido como antagonista, la respuesta está en el primer número de Avengers:



El equipo de respaldo de la agencia S.H.I.E.L.D. a cargo de Nick Fury está muy bien logrado. Samuel L. Jackson patea traseros y retrata muy bien la desobediencia de Fury en el comic para con sus superiores cuando considera que están equivocados. (Para los que lloraron con la trágica muerte del agente Coulson, les tengo un rumor que los alegrará):



Y Hawkeye... bueno, pues es ¡Hawkeye! Y... ¡lanza flechas! Y tiene algunas escenas buenas, y sabemos que el muy maldito se anda dando a Black Widow... y ya.

La batalla final es apoteósica y está elaborada en la mejor tradición de desastres de comic. New York siendo invadida por oleadas de extraterrestres que llegan a través de un portal cósmico dispuestos a arrasar con todo. Recordé Panic in the Sky de DC, los crossovers Marvel vs. DC de mediados de los 90s y, de Marvel, una de las invasiones de Galactus. Todo al mismo tiempo. Poco me faltó para dar de puñetazos al aire en el cine.

Y, bueno... el novio de la muerte. Qué más puedo decir. Que dará pie a la próxima película, por supuesto. Ifyouknowhatimean.

Película de The Infinity Gauntlet FTW

Es todo lo que podría haber esperado hace años de una película con un grupo de superhéroes. Vuelvan a verla. Disfrútenla como enanos, no se preocupen por la falta de lógica... son los jodidos Avengers partiendo madres y salvando al mundo como debe ser: a madrazos. La cantidad de guiños a los comics es impresionante. Solamente existen dos razones válidas para que no les haya gustado la película:

1) Los comics nunca fueron lo suyo. Pidan perdón y retírense.
2) Están "madurando". Si es el caso, qué pena por ustedes.

Es una lástima que DC Comics no haya sabido capitalizar el éxito de Marvel a su favor. Podría haber aprovechado para realizar algo similar con la Justice League, pero solamente han logrado películas realmente buenas con Batman. Por cierto, alguien me preguntó si creía que Avengers era mejor de lo que puede llegar a ser The Dark Knight Rises. ¿Mi respuesta?


Hey, Avengers fue muy buena, pero las de Batman se cuecen aparte. He is the goddamn Batman.


Pero por hoy...
AVENGERS ASSEMBLE!



P.D. El 27 de Julio se estrena The Dark Knight Rises. ¿Ya es 27 de Julio, verdad? ¿YA?

P.D.2 Advertencia: es posible que el post sí tuviera spoilers. Saludos cordiales.